Hemos hablado que el porcentaje de afectados por este problema es mayormente el sexo masculino, por el nuevo estereotipo de “fitness” que actualmente vende la publicidad. Afecta fundamentalmente a los hombres, sin embargo, cada vez es mayor el número de mujeres vigoréxicas.
El desarrollo de la vigorexia está relacionado con alteraciones de la personalidad, sin olvidar los factores socioculturales y educativos; los cánones de belleza modernos y el culto al cuerpo. Como lo podemos ver en algunos ejemplos de famosas que por su afición por cuidar la salud y el cuerpo, han abusado del ejercicio, transformando sus cuerpos en algo poco estéticos.
Un cuerpo en forma es un gesto de salud y buenos hábitos. No obstante practicar ejercicio físico compulsivamente, puede esconder el grave trastorno de vigorexia. Como vemos a Janet Jackson que desde hace muchos cultiva mucho su físico. Pero podemos observar el gran cambio de su cuerpo, de un cuerpo estético aun completamente trabajado por el ejercicio excesivo.
Igualmente observamos a la protagonista de “Sex and the Ctiy” Sarah Jessica Parker si observamos su brazo de lado, vemos que es ancho casi más que su cuello. Y su lado interno está lleno de músculos trabajados, fruto del sobre esfuerzo al que han sido sometidos.
En gusto se rompen géneros, pero lo que es una realidad es cuando el cuerpo ya no se ve estético, y las personas a pesar de lucir un tono muscular bueno, siguen sobre entrenando porque creen que nunca es suficiente, es ahí cuando ya estamos hablando de un trastorno que requiere ser tratado.